Tras los dos plenos de Constitución del Ayuntamiento y de establecimiento de concejalías, sueldos, etc, con el Pleno del 10 de julio empezó lo que realmente es la actividad política. Como puntos de relevancia, se trataron varios temas, como la aprobación de la cuenta del 2018, donde tanto PP como IUMA -ahora en el gobierno municipal- se abstuvieron, y donde el grupo socialista del PSOE defendió su gestión, por medio del viceportavoz José Antonio Rocamora, aprobándose dicha cuenta. Por parte del grupo mixto, su portavoz, Mª Dolores Saurín, recordó que estas cuentas eran hasta final del año 2018, por lo que correspondían a la gestión del PSOE en el gobierno, y en la misma se incluían algunas facturas sin pagar. A este respecto, replicó el viceportavoz del grupo socialista, que dichos gastos eran de la última semana del año, y que como es lógico pensar, no se pagan al día siguiente, sino a lo largo del siguiente mes.
De nuevo volvió a salir el tema del Plan de Saneamiento, que la edil del grupo mixto IUMA recordó que se aprobó en 2012 con los votos a favor del PP y de IUMA, y en contra del PSOE. Plan que se ha venido siguiendo para tratar de pagar la deuda municipal en su momento cercana a los 6 millones de euros y que al término de la cuenta de 2018 se había rebajado a la mitad y estaba en 2,75 millones aproximadamente. En este sentido, el viceportavoz del grupo socialista José Antonio Rocamora volvió a recordar que este Plan no es algo bueno, sino que fue algo que Hacienda en su momento obligó a hacer porque la deuda era excesiva, y había que rebajarla y sanear las cuentas, por lo que era «como si alguien te da una torta y luego te da una tirita, pues gracias por la tirita, pero no haberme dado antes la torta». El alcalde, José Antonio Blasco intervino en este sentido, para recordar que tras la gestión socialista de ahorrar y no gastar, el pueblo había hablado, y el PSOE había perdido votos y un concejal, por lo que le pedía al grupo socialista que dejara volar libre al pueblo, ya que un pueblo necesitaba de inversiones, y no puede vivir siempre del ahorro. Aclarados estos asuntos, se procedió a la votación, con el resultado ya anunciado de 6 votos a favor del grupo socialista y siete abstenciones del resto.
De urgencia, se incluía en el orden del día la moción presentada por el grupo socialista, que solicitaba la aprobación de una serie de bonificaciones y deducciones en el impuesto de la contribución (IBI) para las familias numerosas. En su argumentario, el portavoz del grupo socialista, Ramón Rocamora, indicó que las familias numerosas son las que tienen que hacer frente a más gastos comunes, como lo pueden ser la alimentación, la comida, la compra de ropa, vestuario, material escolar, y lo tienen que hacer con el mismo dinero que tiene cualquier otra familia con menos hijos. En este sentido, lo que se pedía con dicha moción era una ayuda por parte del Ayuntamiento para este tipo de familias, para que pudieran sacar adelante de una mejor manera a sus familias.
Si bien desde el nuevo equipo de gobierno formado tanto por PP como por IUMA se vio bien la propuesta, sin embargo se echaron en cara una serie de peros. Por parte del grupo del PP, su portavoz Manuel Carlos Cutillas, se solicitó que se hiciera un estudio desde el Ayuntamiento para cuantificar de una mejor manera el alcance o impacto que tendría esta medida, ya que entraría en cierto conflicto con la regla de gasto por la cual es preciso tener una cierta recaudación para hacer frente al pago de la deuda del Plan de Saneamiento, y también que se establecieran una serie de porcentajes para cada tipo de exención, según las circunstancias de las familias, si eran familia numerosa o incluso especial.
Por parte de la concejal de IUMA, además de lo anterior, se le recordó al portavoz socialista, que ella llevaba pidiendo esto mismo desde hace ya ocho años, y ni PP en su momento ni tampoco después el PSOE lo habían aprobado. En este sentido le parecía algo oportunista, ya que llegaba cuando acababan de perder el poder en el Ayuntamiento, y además llegaba sin haberse hecho un estudio previo, ya que habían dispuesto de cuatro años de los servicios técnicos del Ayuntamiento para hacer este estudio, y no se había hecho nada al respecto. Además, Mª Dolores Saurín, le replicó que mirase a izquierda y derecha en su bancada, y preguntara a sus compañeros de grupo municipal por qué no habían propuesto esto mismo o lo habían llevado a cabo cuando ella lo solicitó, porque no le valía la razón de que entonces la economía municipal estaba mal y ahora bien, ya que aún no se ha terminado de pagar la deuda del Plan de saneamiento, y del pasado año hubo alrededor de 500.000 € de remanente que gracias a que el gobierno de la nación ahora lo permitió, se aprovecharon para diversas obras al inicio del año. Y por último, en cuanto al contenido en sí de la moción, se pedían bonificaciones para las familias numerosas, cuando todos sabemos que personas en dificultades en nuestro municipio hay muchas, y no sólo las numerosas, pues también hay personas minusválidas en distintos grados, jubilados y pensionistas, y otras con otros motivos que la administración acepta para tener este tipo de ayudas. Por otra parte, aquí se estaba hablando de bonificar en caso de tener que pagar el impuesto de la contribución, cuando puede que dichas familias no tuvieran la propiedad de la vivienda donde residen, y entonces de lo que habría que hablar es de otro tipo de ayudas, del ámbito de los Servicios Sociales y Cruz Roja. Por estas mismas razones, sí, iba a apoyar la Moción, pues todo lo que sea ayudar a las personas es bueno, y así lo llevaba reclamando ya muchos años, pero como ya se ha dicho, el contenido y desarrollo de la moción era muy escueto y este tipo de mociones es preciso trabajarlas mucho más.
En su defensa, el portavoz socialista Ramón Rocamora, argumentó que la razón de presentarla ahora y no antes o después, no era baladí, sino que obedecía al hecho de que el día 1 de enero es cuando se toma como fecha de devengo, por lo que era preciso aprobar esto con suficiente tiempo de anterioridad, para dar un margen previo para que las familias pudieran solicitar formalmente esta rebaja durante el mes de diciembre. Y si se posponía la presentación de esta moción, posiblemente ya no daría tiempo a realizar el estudio y llevar a cabo todo el proceso administrativo. Aclarados todos estos asuntos, y aceptadas las modificaciones propuestas, se procedió a la votación de la moción, resultando aprobada por la unanimidad de los concejales presentes.